Viguetas Navarras, galardonada con el primer Premio Empresa Familiar Navarra

La empresa de Huarte está dedicada al prefabricado de hormigón y ha sido reconocida por ser un ejemplo de “los valores propios de las empresas familiares”

Viguetas Navarras ha sido la empresa galardonada con el primer Premio Empresa Familiar Navarra que concede la Asociación para el Desarrollo de la Empresa Familiar de Navarra (ADEFAN). Este reconocimiento nace con la vocación de realzar los valores de los negocios familiares: arraigo al territorio, compromiso con el empleo, reinversión constante, proyectos a largo plazo, sacrificio e ilusión.

Fundada en 1962 por Luis Ilundáin Eugui, Javier Esparza San Julián y Abel Arrieta Eugui –cada uno partícipe de la sociedad al 33%-, Viguetas Navarras dio sus primeros pasos en unas instalaciones que se encontraban en el núcleo de la localidad de Huarte, pero ya a mediados de los años setenta se trasladaron al Polígono Industrial de dicha población. Es un referente en el sector del prefabricado. Actualmente, factura 9 millones de euros y da empleo a 45 personas, entre las que se incluyen seis hijos de los fundadores y uno de los nietos.

Hoy Viguetas Navarras es uno de los principales fabricantes del sector del prefabricado, gracias a una constante inversión económica y humana, en tecnología, investigación y desarrollo de nuevos productos, como la prelosa de hormigón o su variante de prelosa Leca -una combinación de hormigón H45 y hormigón arlita, orientada a la sustitución de forjados tradicionales en plantas elevadas -.

El gerente de Viguetas Navarras, Luis Ilundáin Ardanaz, ha manifestado el “orgullo” que produce que sea un premio concedido por “las propias empresas familiares” y ha querido recordar la herencia de los fundadores: “Nos enseñaron que hay que creer en lo que haces, ser constante y tener ilusión”. Ilundáin, quien recogerá el galardón el próximo 13 de mayo en representación de la empresa en el marco de un almuerzo con los asociados de ADEFAN en el Castillo de Gorraiz, explica la longevidad de la compañía en su apuesta “por invertir y reinvertir», factor que les ha permitido mantener una diferencia tecnológica con la competencia.

Entre sus apuestas más recientes cabe destacar que, pese a la crisis del sector de la construcción, la compañía no ha despedido a ningún empleado “aunque una gestión escrupulosa nos lo hubiera aconsejado”, reconoce Ilundáin, y también su internacionalización con la que se ha incorporado la tercera generación. De hecho, sus principales clientes se encuentran hoy en el norte de España, pero también en el sur de Francia. La firma ha sido proveedora de proyectos tan referentes como el del estadio de San Mamés, en Bilbao, o el del InterIkea, en Bayona.

ADEFAN  reúne a 108 compañías que generan un 15% del PIB foral, facturan 2.700 millones euros y dan empleo a más de 8.000 personas, se ha fijado para inaugurar el palmarés de este premio en la compañía de Huarte. No son los fríos números los que han hecho que el jurado haya elegido esta firma como primera premiada, sino su “compromiso con los valores propios de la empresa familiar”. “Desde su creación, Viguetas Navarras ha demostrado su vocación de permanencia, compromiso con los empleados, unidad de la familia, entusiasmo con el trabajo bien hecho, flexibilidad para adaptarse a los cambios o aportación al desarrollo económicos de la sociedad navarra”, expone en el acta el jurado, compuesto por los miembros de la Junta directiva de la asociación.

El Premio Empresa Familiar Navarra está patrocinado por Caja Rural de Navarra y cuenta con la colaboración de Arpa Abogados Consultores.